Sigo practicando con el alambre:
miércoles, 15 de mayo de 2013
miércoles, 8 de mayo de 2013
Todo tiene solución
Suele pasar, que a veces los dedos se nos vuelven de mantequilla y cuando más firme debemos tener el pulso, pues ocurre lo siguiente:
Colgante roto...¿y ahora qué? Tirarlo es una pena, pues está nuevo, así que hay que buscar alternativas (sí o sí porque yo no tiro nada sin antes intentarle dar una segunda vida).
Con rocallas, un poquitín de fieltro, una cinta, hilo y mucha paciencia:
¡Colgante arreglado! Lo recubrí de rocallas por todo el contorno, aunque en la foto no se aprecia bien. Comparándolo con el colgante original, el de ahora me gusta más.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)